
io.net ofrece una red descentralizada de GPU, que proporciona potencia informática escalable y asequible para aplicaciones de aprendizaje automático. Los usuarios pueden acceder a un amplio conjunto de GPU de diversas fuentes en todo el mundo, lo que hace que sea más fácil y económico ejecutar cargas de trabajo de aprendizaje automático en comparación con los servicios tradicionales en la nube.